Luis Caputo apuntó contra Marisa Fassi

El ministro de Economía cuestionó el aumento del 124% en las guías de hacienda autorizado por la intendenta Marisa Fassi y el sector cárnico advirtió un impacto negativo en la actividad.

El ministro de Economía, Luis Caputo, apuntó este lunes contra el Municipio de Cañuelas tras conocerse el incremento de la tasa municipal aplicada a las guías de hacienda, un costo que incide directamente en el precio final de la carne.

El funcionario reaccionó en X (ex Twitter) citando una publicación que advertía que la intendenta Marisa Fassi había autorizado un aumento acumulado del 124% en menos de un año. Caputo fue categórico: “Lo único que saben hacer es subir impuestos y aun así tienen déficit”, escribió en su cuenta personal, cuestionando la medida adoptada por la administración local.

Críticas del sector: rechazos desde CAMYA

La suba fue rechazada por la Cámara Argentina de Matarifes y Abastecedores (CAMYA), que advirtió que el incremento no guarda relación con la inflación del período. Según la entidad, la guía municipal pasó de $1.965 a $4.409, mientras que los precios aumentaron apenas 24,8%, y el índice interanual trepó a 31,3%.

Desde la cámara señalaron que “la inflación creció un 25%, pero la guía aumentó 124%, cinco veces más que el promedio de la economía”, lo que —aseguran— configura una actualización desproporcionada y con fuerte impacto sobre las empresas que faenan para consumo local.

Impacto en la actividad

CAMYA remarcó que la suba reduce la rentabilidad, incrementa los costos del circuito formal, afecta la competitividad del sector y eleva el riesgo de informalidad dentro de la cadena cárnica.

Advirtieron que el ajuste en la tarifa repercute en toda la actividad:

  • Aumenta el precio final de la carne,
  • Recorta el margen operativo,
  • Obliga a reacomodar tarifas de faena para sostener la estructura del negocio.

Además, recordaron que el uso de guías municipales es obligatorio para trasladar hacienda a faena dentro del circuito legal, por lo que su costo se convierte en “un gasto operativo directo que afecta la competitividad”.

Compartí este artículo