Una beba de dos meses que nació con apenas 27 semanas de gestación y 1300 gramos de peso recibió un tratamiento con láser por retinopatía del prematuro en el Hospital Cuenca Alta Néstor Kirchner. La intervención fue realizada por los equipos de Oftalmología y Neonatología, que trabajaron de forma coordinada para asistir a la pequeña paciente.
La retinopatía del prematuro (ROP) es una enfermedad que afecta la formación de los vasos sanguíneos en la retina. Solo se presenta en bebés prematuros, especialmente en aquellos con bajo peso al nacer o menos de 32 semanas de gestación, y es una de las principales causas de ceguera prevenible en recién nacidos.
La doctora Alejandra Holze, coordinadora del servicio de Oftalmología Infantil, explicó que el seguimiento temprano permite evaluar la evolución de la retina y aplicar el tratamiento con láser sin necesidad de derivación a otro centro. Esta técnica ayuda a detener el avance de la enfermedad y a prevenir daños irreversibles en la visión.

Además, gracias a la Red ROP de las Regiones Sanitarias VI y XI, todos los bebés con esta condición pueden acceder a tratamientos específicos en tiempo y forma, ya sea mediante láser o con medicamentos adecuados.