Manuel Romero Victorica, quien fue abogado de las hijas de Alberto Nisman hasta 2018, volvió a hablar sobre la muerte del fiscal y reafirmó su firme convicción de que la orden para asesinarlo provino del entorno de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
El abogado destacó el reciente informe del fiscal Eduardo Taiano, que ratifica lo que muchos sospechaban: Nisman fue asesinado y no se trató de un suicidio. Según él, el informe refleja con seriedad y objetividad lo que sucedió. Además, señaló las numerosas irregularidades que se cometieron en las primeras horas de la investigación, como la manipulación de pruebas, la contaminación de la escena del crimen y el ingreso de personas no autorizadas al departamento de Nisman.
Romero Victorica también habló sobre el rol de los espías, vinculando a los servicios de inteligencia del Ejército y de la SIDE en la trama, un tema que, según él, sigue siendo clave en el desenlace de la causa. Asegura que el despliegue de llamadas entre los servicios y las autoridades cercanas al gobierno de entonces da cuenta de una operación mayor para silenciar a Nisman, quien estaba a punto de declarar sobre el atentado a la AMIA y la relación del gobierno con Irán.
A pesar de lo complejo de la causa y de las dificultades que ha enfrentado, el abogado tiene claro que quienes ejecutaron el asesinato ya no están vivos, aunque sostiene que aquellos que dieron la orden siguen en el radar de la justicia. En sus palabras, “con que haya un arrepentido, todo cae”. Sin embargo, también se mostró optimista, confiando en el trabajo del fiscal Taiano y en que, tarde o temprano, la verdad saldrá a la luz.